Bolivia está viviendo la era del oro, desde hace varios años el principal mineral de exportación de Bolivia es el oro. Su aporte al Producto Interno Bruto Minero constituye el 50 por ciento de los minerales que exporta el país.
Su importancia es grandísima además por la cantidad de personas que trabajan en el sector: tenemos más de dos mil cooperativas mineras que emplean más de 100 mil personas.
El programa en directo de Radio Pío XII Cochabamba hablo con La Senadora Cecilia Isabel Requena Zárate sobre el papel de la Asamblea Legislativa en su trabajo de Controlar y fiscalizar la explotación del oro en Bolivia.
La Senadora Requena es: Miembro de la Comisión de Tierra y Territorio, Recursos Naturales y Medio Ambiente y el Comité de Medio Ambiente, Biodiversidad, Amazonía, Áreas Protegidas y Cambio Climático
La autoridad legislativa rebeló datos preocupantes:
- No tenemos acceso a la información de la realidad de la minería legal
- y mucho menos de la minería legal.
- Ni los Senadores tienen acceso a la informacion minera
- Bolivia está viviendo en un caos en la explotación minera del oro.
- La ley minera de 2015 ha creado un monstruo que:
- Está destruyendo y contaminando las áreas protegidas,
- Está destruyendo la vida de los indígenas de las regiones.
- Esta saqueando el recurso no renovable que es el oro
- Esta creando ricos poderosos intocables.
- Esta creando círculos de delincuencia de tráfico de personas.
- Está creando vínculos con el narcotráfico y grupos armadas incluso internacionales
Los recursos de los bolivianos están en manos privadas
La senadora rebelo también que en Bolivia se explota oro por un valor anual que supera a lo registrado en cada uno de 17 de los últimos 20 años de exportaciones de gas.
La tributación en regalías llega al 2,5 por ciento e incluso al 1,5 (si venden su producto a joyerías nacionales), los productores mineros del oro se resisten a pagar otros impuestos.
Se comercializan cerca de 2.000 millones de dólares, lo que recibe el Estado apenas llega a 50 millones de dólares.
El Estado y la sociedad boliviana en general se benefician muy poco de esta abundancia de oro.
Critico la gestión de gobierno del MAS-IPS porque contradictoriamente a lo que predican están privatizando el oro en Bolivia
Las salidas
La senadora propone dos tipos de trabajos urgentes:
La primera tiene que ver con un pedido de auxilio de nivel internacional, para que desde ese nivel podamos exigir la intervención del estado boliviano en bien del bien común.
Y continuar luchando por concientizar a la población boliviana sobre la dimensión de este monstruo de la explotación del oro.
Por su parte analistas bolivianos como Héctor Córdoba proponen:
- La Desconcentrar de la administración central el control del flujo de minerales y metales, particularmente del oro.
- Habría que pasar a las gobernaciones buena parte de ese control, pues los interesados son ellos, ya que reciben las regalías.
- Centralizar la comercialización en una sola entidad del Estado que compre el oro a todos los operadores.
- Transparentar la información del pago de regalías porque los operadores se aprovechan para pagar siempre las mínimas.
- Las cooperativas y empresas auríferas deben pagar el Impuesto a las Utilidades.
Donde va la producción del oro
La información disponible muestra que aproximadamente el 45 por ciento del consumo de oro va a parar a la joyería, o sea para el consumismo de la opulencia. Los principales consumidores están en China, India y otros países del oriente y medio oriente.
El otro 45 por ciento va para acuñar monedas y lingotes, o sea para los financistas, banqueros y muy ricos. (…)
Por lo tanto, para ser claros, nuestros países padecen la lepra de la minería de oro para nutrir las necesidades de opulencia y consumismo de señoras en el oriente o de banqueros en el occidente.
Nosotros nos quedamos con todos los impactos sociales, ambientales y económicos, para que se puedan vender aretes y collares de oro, pongamos por caso, en India o China.